Golpes bien puestos
-
Envuelve la base de la botella con una toalla o trapo o coloca una guía telefónica contra el tronco de un árbol o una pared.
-
Golpea repetidamente, de manera firme y pareja, la base de la botella contra una superficie sólida, plana y vertical (como el tronco de un árbol o una pared). La presión del vino contra el corcho gradualmente lo empujará hasta sacarlo.
- Como alternativa, puedes sujetar la botella invertida entre las piernas y golpear la base con un zapato.
-
Cuando el corcho asoma por encima del pico de la botella, lo puedes sacar con los dedos o con pinzas. También puedes continuar golpeando rítmicamente la botella hasta que el corcho salga del todo (cuidado con salpicarte con vino, ya que la botella está acostada). Si estás tratando de abrir una bebida gasificada, como champagne o cerveza lambic, deja reposar la botella durante 10-15 minutos antes de sacar totalmente el corcho, así evitarás perder el contenido y bañarte con vino.
Con un implemento casero
Trata de sacar el corcho utilizando alguno de los siguientes métodos. Trabaja con cuidado para evitar que el corcho se rompa en pedazos. Asegúrate también que los objetos que se ponen en contacto con el corcho estén limpios; los objetos sucios pueden arruinar tu preciado vino.
-
Busca un tornillo y una pinza. Cuánto mayor sea la distancia entre las vueltas de rosca del tornillo, mejor.
- Coloca el tornillo en el corcho, introduciéndolo hasta que quede afuera aproximadamente ½” (1.2 cm).
- Usa la pinza para sacar el corcho tirando del tornillo. La uña de un martillo (que se usa para sacar clavos) también puede servir en lugar de una pinza.
- Coloca el tornillo en el corcho, introduciéndolo hasta que quede afuera aproximadamente ½” (1.2 cm).
-
Usa la hoja de un cortaplumas o de un cuchillo con punta. Debe ser una hoja angosta, que quepa fácilmente en el cuello de la botella. Algunos recomiendan usar un cuchillo de filo con sierra. Nota: Si usas el cuchillo para extraer el corcho desde el costado, asegúrate de hacer presión suave y pareja en el “fulcrum” (borde del pico de la botella) que es frágil y se rompe fácilmente. Si usas este método, lo mejor es empuñar el pico de la botella por debajo del cuchillo y apoyar el mismo en tus dedos para hacer palanca en lugar de usar el “fulcrum”. A medida que vas sacando el corcho puedes levantar la mano para mantener un buen punto de apoyo. Esto se parece a abrir una botella de cerveza con un encendedor (yesquero).
- Introduce cuidadosamente el cuchillo clavándolo en el corcho con movimientos pendulares y con un mínimo de presión hacia abajo.
- Una vez que está clavado en el corcho, retuerce el cuchillo cuidadosamente y tira suave y lentamente hasta sacar el corcho.
-
Busca una percha de alambre y endereza el gancho de colgar.
- Utiliza una pinza para doblar un pequeño (1/2” = 10 mm) gancho de 30º en la punta (como un anzuelo).
- Introduce el gancho entre el vidrio y el corcho hasta que quede por debajo de éste.
- Gira el alambre 90º de manera que el gancho se apoye en la base del corcho y sácalo tirando del alambre.
-
Busca un gancho para colgar bicicletas (del tipo que se atornilla en las vigas de madera)
- Atorníllalo en el corcho.
- Empuña el gancho que viene cubierto de plástico como si fuera una manija y tira para sacar el corcho.
-
Utiliza un cordón o cinta de cuero.
- Ata un nudo de rizo en el extremo del cordón.
- Empuja el nudo por entre el corcho y el vidrio utilizando cualquier objeto punzante, hasta que el nudo esté por debajo del corcho.
- Envuelve en la mano el resto del cordón y tira lentamente sacando el corcho. Si el nudo se pasa, ata un nudo más grande.
-
Consigue 2 broches para papel y un bolígrafo (lapicera). Endereza parcialmente los broches, dejando intactos los extremos en forma de U.
- Introduce uno de los extremos en U entre el corcho y el vidrio, aprovechando el otro extremo para empujar, hasta que el extremo introducido pase por debajo del corcho.
- Gira el broche 90º de manera que el gancho se clave en el corcho cuando tires. Repite el procedimiento en el costado opuesto del corcho con el otro broche.
- Endereza los broches y retuerce juntos los extremos de los mismos. Introduce una objeto adecuado (cuchara, cuerpo del bolígrafo, lápiz, etc) por debajo de los alambres retorcidos. Empuña el objeto de manera que el alambre quede entre los dedos medio y anular y tira lentamente hasta sacar el corcho.
-
Usa un soporte de mazorca. Los soportes fueron diseñados para sostener una mazorca con maíz bien enmantecado; consisten de una clavija con 3 púas.
- Inserta las púas en el corcho
- Rotando suavemente, tira de la clavija para sacar el corcho.
- Usa una fresa tipo Fostner, como las que se usan para trabajar la madera. Si tienes una fresa de éstas, atornilla la parte superior, asegúrate que esté firme y luego tira para sacar el corcho.
Empuja el corcho
-
Perfora el corcho de punta a punta. Esto es para liberar la presión cuando empujes el corcho.
-
Asienta la botella en el suelo o en una superficie firme.
-
Empuja el corcho usando una varilla, un marcador grueso, etc. Cualquier vara de madera o metal es adecuada. Dirige el pico de la botella de manera que no salpique a nadie si el vino sale a presión.
- También puedes utilizar una llave para hundir el corcho. En este caso conviene introducir la llave entre el vidrio y el corcho, de manera que se libere la presión cuando la parte más gruesa de la llave empuje el corcho.
Con un martillo
-
Consigue 5 clavos, un martillo y una mano hábil.
-
Clava cuidadosamente los clavos en una línea, bien cerca uno del otro.
-
Utiliza la uña del martillo, empleando el pulgar como punto de apoyo.
Reblogueó esto en Acuarela de palabrasy comentado:
Una entrada muy ilustrativa. Gracias!
Pingback: 8 accesorios que no pueden faltar en tu cava de vinos |
Pingback: ¿Te gusta el vino? 8 complementos que no te pueden faltar al momento de una cata – The Big Wine Theory