Según recientes estudios una copa de vino ayuda a prevenir la caries dental, enfermedades de las encías y el dolor de garganta.
Ambas variedades, tintas y blancas, tienen poderosos ingredientes germicidas, afirman los científicos italianos.
Sus resultados se suman a un creciente cuerpo de investigaciones que demuestran los beneficios del vino para la salud.
Ya se conocen los beneficios que el consumo moderado de vino tinto tiene para reducir el riesgo de enfermedades del corazón, cáncer y enfermedad de Alzheimer.
Sin embargo, las cualidades antibacteriales de la bebida, aunque bien conocidos por los antiguos romanos, han sido poco investigado, dijo la profesora Gabriella Gazzani, en un artículo escrito para la revista American Journal of Agricultural and Food Chemistry.
El equipo de la profesora Gazzani utiliza botellas tomadas al azar de Valpolicella y Pinot Nero para su investigación, vertiendo estos vinos en recipientes que contienen bacterias.
“En general, nuestros resultados parecen indicar que el vino puede actuar como un agente anti-microbiano eficaz contra las bacterias estreptococos y las infecciones del tracto respiratorio superior”, dijo ella.
La profesora añadió, sin embargo: “debemos seguir bebiendo vino porque sabe bien, va bien con la comida y es un placer compartirlo con compañía. Así mismo, debemos seguir cepillándonos los dientes y usar el hilo dental de forma usual”.
Fuente: http://www.dailymail.co.uk